Niebla profunda inspirada por pulmones petrificados ante el frío de los azules de los ojos trágicos de la ciencia. Terrible eficacia arrasa luchas, sentimientos, vida... apocalíptica técnica sigue empalideciendo los sentimientos callados de las aguas del silencio.
Belleza sorda silenciosamente extraña, que bien estabas antes de todo este ruido. Monedas frías, como el azul de los ojos trágicos, corren de garganta en garganta, discurso en discurso, lágrima a lágrima dentro de un universo sin deseos realmente satisfechos.
Cadáveres bien olientes cargados de dineros s dirigen a los ojos trágicos de la vida como si fueran Dios. Son unos ojos... pobres ojos, son muy bonitos, pero nadie los sabe mirar bien.
-Queridísimos ojos trágicos y azules, soy vuestro, lo soy, pero solo porque os sé ver bien. Soy vuestro por el amor que me habéis dado, y me gusta mucho el arte, también soy suya, pero tú eres quien me congela la realidad y me la petrifica en algo por lo que luchar. Realmente lucho por ti, lucho por el frío azulenco de tus miradas, lucho para que no quemen a la gente, lucho por el amor frío que desprende y no el odio caliente sin tregua.
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