Inútil i importante

Pequeños ensayos importantes e inútiles del día a día que invitan a pequeñas o grandes reflexiones. Aquí es donde después de cuidar mis ideas las entierro.

jueves, 2 de junio de 2011

Libertad al texto: el tiempo




Mientras yo enganchado como una raíz y tú volando como un astro, la tierra me avisa del dolor que me tapará de un solo vuelo. Jubilosas tristezas me acarician la piel y cada caricia, cada mirada, me hace más viejo. Claro, tú eres aquel que me robó el fuego y me quema mientras me roba el sitio. En este texto lanzo mi áncora y me quedo atrapado sin límites, sin claridad, sin distinción y dejo el tiempo quemado sentado en un papel. A descansar hombre, que corres mucho!

Pero fuera de este texto, los pájaros seguirán cantando encarcelados, igual que yo. Y por eso dejo escrito este canto. Dejo pasar una carta entre las rejas de la cárcel, escribo mi nombre en ninguna parte, y es precisamente nadie en ninguna parte quien realmente escribe la historia. Pues este texto... me horroriza.

Libertad, horrible libertad. Anhelamos desde nuestro nacimiento no ser libres, y mi pobre texto sufre de libertad, esa enfermedad tan poco común. Pobrecito, yo le dejo sin tiempo! Lo condeno a ni vivir, ni morir. Tal es mi poca piedad que salpico fuego entre mis dedos dejando las horas aplastadas aquí, con el texto.

Dulce tiempo... te has enamorado de mí, pero tanto te quise que... me he cansado de ti. Deja de abrazarme tan fuerte que ya me haces daño, deja de esclavizarme de amor. Tantos besos me das, que tantos segundos no pasan; tantos huevos rompes y tan pocas tortillas haces. Tan oníricas miradas me seduces que has encontrado la manera de que te mire a los ojos, a tu libertad infinita, encarcelando a este texto con un áncora en el tiempo. Yo lo libero.

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